18 junio 2003
22 preguntas para la próxima temporada
 

 

A los jugadores: ¿cuál es la ventaja estratégica de sacar un córner o una falta en corto y dejar que se adelanten los defensas? ¿Por qué los delanteros de los equipos que van perdiendo se empeñan en presionar al guardameta contrario para que tarde más en soltar el balón? ¿Se creen los porteros que salen más guapos o con más carácter en la tele por echar la bronca padre a sus defensas? ¿Los goleadores aprenderán algún día la elegancia de celebrar un tanto sin ridículas alharacas? ¿Para qué coños sirve una rabona?

A los jueces: ¿para cuándo los cronos electrónicos, que pongan fin al reloj corrido y a las pérdidas de tiempo innecesarias? ¿Y el vídeo para que los árbitros verifiquen las jugadas polémicas in situ, como en fúbol americano? ¿Por qué los colegiados abdican de su misión de poner las barreras a nueve metros? ¿Qué criterio es ése de que un empujón “no ha sido suficiente” para pitar penalty? ¿Cuándo se aplicará la norma de que los fueras de juego dudosos no son fuera de juego? ¿Por qué no convertir a los linieres en árbitros de zona? ¿Se gana el sueldo el cuarto árbitro? ¿No se podría desmotivar el juego defensivo con cero puntos para todos después de un 0-0? ¿Y no se debería proteger a los artistas frente a los leñeros y procesar por crímenes contra la Humanidad a un tipo que nos dejara tres meses sin ver a Valerón?

A los receptores: ¿es imprescindible que los comentaristas de radio hagan el payaso y den una importancia desorbitada a algo que no es más que un partido de fútbol? ¿Y que los diarios deportivos se aferren a las portadas de letras grandes y contenido emocional, en la más pura tradición de la prensa sensacionalista? ¿Cuándo dejarán de dar tanto pote al delantero que sólo empuja el balón y le concederán el mérito al que ha dado el último pase? ¿Llegará el día en que el gol desperdiciado por un ariete chupón se considere tan grave como el encajado por un fallo del portero? ¿Qué sentido tiene acusar de no sentir los colores a un jugador que ya no está jugando en el equipo de su colegio? ¿Por qué los seguidores, a su vez, han de serlo año tras año de un equipo que cambia de jugadores? ¿En la vida real los hinchas dejan de ser unos oligofrénicos?

A Dios: ¿hay alguna relación entre la potra de los equipos italianos, las preferencias en las oraciones del Papa y el hecho de que los años malos de aquéllos hayan coincidido justo con la época más débil de éste?


 

 

Referencias y contextualización

A comienzos de la temporada 2002-2003, el defensa boliviano del Real Valladolid Juan Manuel Peña lesionó tras una dura entrada al centrocampista del Deportivo de La Coruña Juan Carlos Valerón, uno de los jugadores más técnicos de España.

La final de la Liga de Campeones de este año la disputaron el Milán y la Juventus, después de varias temporadas en las que los equipos italianos habían perdido su preeminencia, tradicionalmente tan compatible con su juego rácano. Juan Pablo II se había mostrado estos últimos meses muy recuperado en comparación con el postramiento al que la vejez venía sometiéndole en los últimos años.

Otro artículo crítico con la parafenalia que rodea al fútbol es "Fútbol es fútbol".

 

 

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